Las habitaciones

SILENCIO Y COMODIDAD ENTRE MUROS DE ADOBE

Encantadores ambientes de descanso

Prepárate para retroceder en el tiempo sin perder la comodidad de nuestra época. Duerme en el silencio que garantiza la estancia en La Alameda, rodeada de un espacio natural que aísla tu sueño.

La alcoba de la tía Engracia

Debe su nombre a la ultima mujer que habitó la casa. Techos teñidos de añil manchego, suelos y paredes blancas.

El pajar de Manuel

Manuel es la persona que ha puesto sus manos para rehabilitar la casa. Las ramas centenarias de los olmos sostienen la cubierta de lo que fue el pajar de la casa.

El cuarto de Marcelo

La más humilde de las estancias dedicada al hortelano que aún hoy pasea por la alameda.

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